Los instrumentos piezoeléctricos son cada vez más comunes en el mundo de la odontología ya que tienen ciertas ventajas, como una preparación más segura y eficaz del tejido óseo para realizar la cirugía mínimamente invasiva.
El efecto piezoeléctrico es un principio físico según el cual los cristales de cuarzo vibran cuando se suministran corrientes eléctricas. Debido a unos mecanismos de transferencia, la vibración que aparece en el cuarzo se convierte en movimientos del inserto y se consigue una retirada específica del tejido.
Actualmente se llevan a cabo muchos tratamientos de cirugía mínimamente invasiva. Los avances en la tecnología han permitido convertir las operaciones con piezoeléctricos en una técnica más rápida, con mayor potencia y determinación en la eliminación de tejidos. Estos equipos se utilizan para preparar el tejido óseo y llevar a cabo una intervención quirúrgica. Los instrumentos piezoeléctricos y la tecnología ultrasonido preparan a los tejidos duros con delicadeza para llevar a cabo la operación.

Este tipo de cirugía tiene distintas ventajas. En primer lugar, tiene eficacia selectiva; es decir, tiene efecto en materiales calcificados como los huesos y piezas dentales y en los tejidos blancos solo se produce una absorción de esta vibración. Por tanto se pueden retirar los tejidos duros deseados con una preparación previa adaptada a la dentadura. De hecho, esta es su segunda ventaja. El inserto sufre una desviación mínima, y como resultado se obtiene una preparación planificada del corte quirúrgico del hueso -también llamada osteotomía-.
Asimismo, los instrumentos piezoeléctricos son útiles para aumentar la seguridad de la operación y reducir el riesgo de posibles lesiones. También consiguen una muy buena iluminación del campo quirúrgico, debido a las luces LED integradas en el instrumento.
Los inconvenientes de otro tipo de piezas quirúrgicas tales como fresas rotativas u oscilantes son varios. En primer lugar, no definen con tanta claridad la línea de osteotomía y puede haber pequeñas variaciones entre la planificación de la operación y el resultado final. Por otra parte también se puede producir una desviación fortuita de estos instrumentos rotativos.
Las principales aplicaciones de los piezoeléctricos dentales son la elevación del seno maxilar, la preparación cerca del nervio, la terapia periodontal, la obtención del hueso autógeno o la partición ósea. En entradas posteriores os hablaremos de estas aplicaciones en particular.
Si deseas información sobre cualquiera de estas aplicaciones no dudes en acudir a la Clínica Dental Conrado Andrés y solucionaremos todas tus dudas.